Medidas y sistemas de seguridad en Ascensores

La seguridad en los ascensores no es solo un interés que suelen formular los compradores de estos equipamientos, sino que también constituye un requisito legal de imprescindible cumplimiento para su instalación. En este sentido, la seguridad en los elevadores se está convirtiendo en una de las garantías más demandadas por los clientes, por lo que los fabricantes y las empresas de mantenimiento de ascensores tratan de dar respuesta a las exigencias planteadas por el mercado actual.

La seguridad en los ascensores constituye un requerimiento ineludible. De todas maneras, por imperativos de deontología propia de la profesión de ascensorista, marcas como Ascensores BCN se habían impuesto la obligación de cumplir con las máximas condiciones de seguridad. Es decir, no se trataba solo de una exigencia legal, sino también de un afán por mantener los elevadores en perfecto estado, no solo a nivel de funcionalidad y estética, pues tampoco, lógicamente, se descuidaba la seguridad.

No en vano, la seguridad de estos equipamientos es clave, tanto en los entornos caseros (viviendas unifamiliares o comunidades de vecinos) como en los negocios. El desarrollo urbanístico, tan vinculado a la edificación en altura, ha propiciado una mayor complejidad de las construcciones. Los ascensores, como no podía ser de otra manera, han tenido que adaptarse a esta creciente sofisticación.

Las posibilidades de padecer un accidente en un ascensor, el cual puede llegar a causar la muerte, se han de minimizar hasta desaparecer. Una reflexión similar cabe realizar respecto a otros problemas relacionados con la seguridad que se pueden experimentar en un ascensor, tales como los atrapamientos.

Estas medidas de seguridad fundamentales se garantizan mediante el mantenimiento. En este sentido, empresas como Ascensores BCN, con sede en Barcelona, brindan a sus clientes un servicio ininterrumpido de mantenimiento. Los operarios que se encargan de dicho servicio hacen gala de su profesionalidad y tienen la capacidad requerida para reparar todo tipo de averías, lo cual solventa las interrupciones en el servicio de elevadores. Además, se encargan de resolver otras incidencias, no solo las relacionadas con fallos del servicio, sino también las que implican incidentes directamente asociados a problemas de seguridad, tanto a nivel preventivo como en intervenciones ante el surgimiento de problemas.

Aspectos generales sobre los sistemas de seguridad en los ascensores

Como también se desgranó con anterioridad, existen normativas de obligado cumplimiento que garantizan la seguridad de los ascensores. Las medidas de seguridad básicas se complementan con la introducción de avances tecnológicos de gran sofisticación. Por ejemplo, una normativa que certifica la calidad de la seguridad de los ascensores es la Directiva 2006/42/CE, emanada de los órganos comunitarios.

A modo de resumen, en las siguientes líneas se citan algunos de los sistemas de seguridad que se están implantando en los ascensores modernos:

• Paracaídas de acción inmediata
• Detección de aflojamiento de los cables de suspensión
• Mecanismo auxiliar de rescate
• Luces de emergencia dentro de la cabina
• Señalización acústica y visual cuando se rebasa la carga máxima
• Botón de alarma en la cabina
• Teléfono dentro de la cabina
• Mecanismo automático de renivelación de la cabina
• Doble sistema de seguridad en las cerraduras de las puertas del piso

Elementos de la seguridad del ascensor

Llega el momento de descender a las explicaciones más específicas respecto a cómo se ponen en marcha los mecanismos de seguridad en un ascensor. Este repaso, por su parte, se centra en algunos elementos concretos, los cuales son imprescindibles para garantizar la protección de las personas que utilizan los ascensores.

A continuación, se analizan algunas de estas piezas, tan importantes para el correcto funcionamiento de los sistemas de seguridad de los ascensores:

• Enclavamiento mecánico. Se trata del sistema que permite abrir las puertas en cada uno de los pisos. Habilita también la parte eléctrica, que es la que posibilita el movimiento del elevador. Por otra parte, las puertas pueden ser automáticas, semiautomáticas y manuales.
• Paracaídas. Funciona mediante un mecanismo de palancas cuyo movimiento impulsa unos rodillos y unas cuñas situados al lado de las guías o cajas de cuñas. Si la velocidad de la cabina rebasa la normal o esta se ha caído, las guías serán mordidas por los rodillos o las cuñas y se detendrá la cabina. Por otro lado, existen paracaídas progresivos e instantáneos, para ascensores, respectivamente, de media y alta velocidad.
• Timbre de alarma. Constituye uno de los mecanismos de seguridad más visibles para el usuario. Por este motivo, la inmediatez de su accionamiento se ha convertido en el primer elemento de seguridad al que suelen recurrir quienes se han visto envueltos en alguna incidencia dentro de un ascensor. Generalmente, se utiliza en casos de emergencia. Por ejemplo, cuando una persona está atrapada en la cabina del elevador. Algunos timbres de alarma, por su parte, están conectados a líneas telefónicas, por lo que se podría solicitar asistencia a través de ellas. Por lo que respecta al funcionamiento común del timbre de alarma, hay que destacar que, en caso de corte del suministro eléctrico, el alumbrado de socorro se enciende automáticamente dentro de la cabina. Por lo tanto, la alarma podrá ser usada, ya que posee su propia alimentación mediante acumuladores. El restablecimiento del sistema corriente de electricidad implica que se apague el alumbrado de socorro y se recargue automáticamente el equipo del elevador.
• Parada de emergencia. Este dispositivo sirve para interrumpir las maniobras. Se produce el corte de la alimentación del grupo tractor, lo que tiene un efecto de freno. En este sentido, se detiene el ascensor, de manera que no van a funcionar los mandos de cabina y pisos. En principio, este mecanismo ha de dejar moverse a la cabina hacia la parada más baja.
• Limitador. Los expertos consideran que es un elemento crucial en la seguridad del ascensor. Está compuesto por dos poleas. Una se encuentra en el cuarto de máquinas y la segunda está alineada verticalmente con la anterior al fondo del hueco. Un cable de acero se extiende través de estas dos poleas y sus extremos se unen a partes del bastidor: un punto fijo y sistema de palancas de la parte superior. Este cable acompaña permanentemente a la cabina, pero es independiente al de tracción, por lo que no interviene ni en el contrapeso ni en la sujeción de la cabina. Si la cabina supera la velocidad normal en un 25 %, se producirá la detención en la polea superior del limitador. El paracaídas, el sistema de palancas definido con anterioridad, será activado por el cable limitador. Tanto en la polea superior como en el mecanismo de encuñamiento de la cabina estará incorporado un contacto eléctrico que cortará la serie principal para que el motor no funcione cuando la cabina se haya quedado clavada a las guías mediante el mecanismo de encuñamiento.

Soluciones de seguridad globales para los ascensores

Ascensores BCN y otras empresas del ramo de la elevación están incluyendo, entre los servicios que prestan a sus clientes, la asesoría relativa a las necesidades de cada equipamiento. Se trata de una concepción integral del servicio, la cual tiene en cuenta las funciones, el diseño y -por supuesto- la seguridad. En cierto modo, se encaja el ascensor en la línea arquitectónica del edificio y se adapta totalmente a los requerimiento de su uso concreto.

Aparte de cumplir con las estrictas normativas europeas de seguridad, se están implantando, progresivamente, otras medidas de protección adicionales, tales como el sistema multipantalla digital o el de seguridad a distancia (REM).

En definitiva, la seguridad supone el aspecto más relevante de un ascensor, de manera que no se debe descuidar y vale la pena contar con la contribución de empresas que ofrezcan garantías, confianza y cercanía.